domingo, 28 de agosto de 2011

Kiko Veneno

Jose María López Sanfeliu, Kiko Veneno,  por el destino (el que deciden los mandos militares) nace en Figueras, la de Dalí, el 3 de abril de 1952. Su padre es un militar al que envían a Sidamunt en busca de los últimos maquis de la zona, su madre una payesa que nunca ha salido del pueblo y trabaja en el negocio familiar, la única tienda del pueblo a la que van a quedarse los mandos, aunque pronto baja a Cádiz. Catalán de madre y primos, de veraneo, pero con infancia de playa larga, levante, y carnavales. Desde los tres años vive en Andalucía y, tras un salto al Madrid de la Movida ya no se mueve del sur. Cuando Kiko escuchó con quince años a Dylan tendrá una premonición: va a ser músico.
En 1973 se va a los EEUU buscando otras cosas, y se encuentra, curiosamente, con el flamenco. Un gitano de San Francisco le redescubre el toque. Vuelve habiendo escuchado a Dylan en Houston, y hecho un hippie. Una rareza incongruente en aquella Sevilla de entonces.
Cuando en 1975 conoce a Raimundo Amador la suerte ya está echada.  Raimundo y Rafael, que eran unos muchachitos, pero conocían mucho, se encontraron con un hippi, un deslumbrado en aquella Sevilla. Los Amador ya habían tocado mucho, y bueno, pero casi todo flamenco. Kiko ni siquiera vislumbraba con claridad la música como modo de vida; no sería hasta más tarde cuando pensaría que aquello tenía que dar de comer, de momento sólo tenía la mente abierta y se sentía libre. Tocar y tocar, eso fue Veneno. Reunirse, casi siempre en casa de Kiko, y tocar sin parar. Disfrutando, sin consecuencias. Por la música misma se fueron concretando los temas, sin trabajar. Ninguno tenía idea de qué estaba haciendo, sólo tocaba, cantaba, iba a su bola. Cuando entendió que después de todo iba a ser músico, aquello ya no podía seguir. Era padre, faltaba el pan y allí no llegaban jurdeles. Veneno era una ruina. Era demasiado tarde para volver a ser libre, sin pensar en consecuencias. El juego no podía seguir.
Con el gusano de vivir de la música ya mordiendo, en 1976, se pasa seis meses en Las Canarias, viviendo del aire en las playas y las cuevas, y tocando y componiendo. Después vuelve a Andalucía para recorrerla con amigos que van haciendo teatro y haciendo música donde les dejan.
En 1977 publica Veneno, el disco que ha recibido las mejores críticas del pop español, pero treinta años después. Entonces nadie entendió. Ese mismo año nace su primer hijo, después vendrán dos más. En 1978 e disuelve Veneno con más pena que gloria. Kiko quiere vivir de la música y así no puede. En 1979 colabora en "La leyenda del tiempo". Su rumba Volando Voy, cantada por Camarón de la Isla, sale como single. Los viejos devuelven el disco diciendo que eso no es flamenco. La Historia vuelve a repetirse: un disco adelantando a su época. En 1980 se retira a las costas de Cádiz y monta un chiringuito en Conil. De algo hay que vivir.
En plena Movida se va a Madrid para grabar su primer disco en solitario, Seré mecánico por ti, (1981) muy alejado del anterior y Si tú, Si yo en 1984
En 1985 colabora con el programa "La Bola de Cristal" de TVE. En 1986 produce "Estoy mala", primer LP de Martirio, pero ni esto le da para comer. Así que comienza a trabajar como Coordinador de Actividades Culturales en la Diputación de Sevilla. Estará allí durante seis años. En 1987 graba Pequeño salvaje producido por él mismo. Después de una sucesión de intentos El pueblo guapeao (1989) es un punto y aparte. Sin Rafael, Amador y sin Ricardo Pachón, pero la vuelta de Veneno. No es un disco, en realidad el resultado final es una maqueta.
Cuando se reencuentra con Santiago Auserón (ya siendo Juan Perro), conocidos de La Movida,  se gesta Échate un cantecito, y después la gira con Santiago Kiko Veneno y Juan Perro vienen "Dando el Cante".
Tres años después con Está Muy Bien Eso del Cariño (1995), consigue otro disco redondo. Ese mismo año Kiko produce y apadrina el primer y único LP de Caraoscura, "¿Qué es lo que Quieres de mí?" (1995), el grupo que iba a llamarse Mártires del Compás. Aquel gran trabajo, sin apoyo promocional alguno, y lastrado por la confusión del cambio de nombre a última hora, pasa desapercibido.Después vienen Punta Paloma, Puro Veneno, La Familia Pollo, Un Ratito de Gloria, El Hombre Invisible y Dice la Gente, además de sus colaboraciones y producciones.



2 comentarios:

  1. Qué música tan estupenda tiene este blog. Podría ser yo misma quien hiciera las entradas, pero no, no soy yo. ¿Quién será esa tal Ana B. que tiene un oído tan afinado.

    Fuera bromas: estupendo kiko (y los demás).

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  2. Gracias Mares Lión. Me alegro que te esté gustando. Besos.

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