miércoles, 24 de agosto de 2011

La Lupe

La Lupe fue el nombre artístico de Lupe Victoria Yolí Raymond, cantante cubana nacida el 23 de diciembre de1936 en San Pedrito, Santiago de Cuba y fallecida el 28 de febrero de 1992 en Nueva York. San Pedrito es una barriada periférica, habitada por gente de extracción humilde, con calles sin asfaltar -entonces y ahora-. Un sitio donde se acude al llamado de los tambores, se concentra la mulatez y los problemas suelen resolverse allí mismo; sin que le falte esa “fama de esquina” que… suele agregar lo suyo.
La Lupe, también conocida como "la Reina del Latin Soul" o "la yiyiyi", es hija de la guantanamera Paula Raymond Soler y el santiaguero Tirso Yoli Michel, trabajador de la empresa Bacardí, que toleraba mal su afición a cantar. En consecuencia, la muchacha estudió para maestra en la Escuela Normal… mientras seguía actuando al aire libre y en concursos radiales.
Un espíritu como aquel, sin embargo, no se doblegó ni a la autoridad paterna.
Sin que su progenitor se enterara, asistió a un concurso de aficionados de una emisora radial de Santiago de Cuba.
Afirman que la joven había ido a pie de su casa a la emisora, con un calzado que le apretaba y… cuando llegó su turno (libre de la atadura de sus únicos zapatos) salió a cantar descalza.
En 1958 su carrera musical se impulsa como integrante del trío Los Tropicubas. El músico, Eulogio “Yoyo” Reyes había quedado rendido a sus pies y se convertirá en su primer esposo… pero ni el trío ni el matrimonio podrán ponerle riendas a una Lupe incontrolable dentro y fuera del escenario. Y aquello se quiebra.
Irreverente, marginal, hiriente, trepidante, teatral, visceral, impúdica, salvaje, ciclónica, agresiva, demente, sensual, escandalosa, excitante, única, truquera, descarada, excéntrica, legendaria, irrepetible…
En 1960, la artista graba su primer disco, nunca con mejor título: Con el diablo en el cuerpo.
El naciente proceso revolucionario lo sacude todo y se radicaliza frente a muchos desafíos. Los centros nocturnos son nacionalizados, y La Red no es excepción. A la luz del nuevo contexto, se reaviva la polémica sobre La Lupe y algunos reinterpretan su estética “marginal”, su “arte nervioso”… más allá del cabaret.
Todavía hay quienes recuerdan con asombro sus presentaciones en la televisión cubana que “puso los pelos de punta”. Aquellos excesos no le ganarían buena fama; aunque tal vez otros demonios se desencadenaron.
La Lupe parte de la Isla hacia México en 1962… Sin embargo, aquellos impulsos no le abandonaron.
¿Hasta dónde aquella fiebre no era más que teatralidad, un recurso escénico llevado al límite? ¿Hasta dónde era el impulso de los demonios que la asfixiaban? ¿Hasta dónde fue resultado de las drogas que unos dicen usó y que otros fervientemente niegan?
El tiempo se encargará de despejar las verdades, aunque los mitos nunca puedan asirse definitivamente.
Y lo cierto es que cada aparición suya se convertía en un suceso, que en sus mejores demostraciones, la interpretación de La Lupe no aparece rasgada por la excentricidad.
Sus primeros éxitos están al lado de Mongo Santamaría, luego las palmas junto a Tito Puente con quien hace “la mancuerna perfecta”.
Rinde al Madison Square Garden y al Palladium, se le consagra como Reina de la Canción Latina, pues lo mismo hizo un montuno que un joropo, un guaguancó que una copla, un merengue que un mambo o ¡un bolerazo!, más de uno… todo a su manera.
Tite Curet pone en su alma, “Puro teatro” y “La Tirana”, mientras ella se compra una mansión y no escatima en pieles, en joyas, que es su oportunidad, que no nació en cuna de oro.
La periodista venezolana Lil Rodríguez, voz autorizada sobre la música del Caribe, nos ha dicho que: “fue Venezuela la casa de sus glorias. Acá la amaron hasta la locura hombres de radio y productores de televisión que en mucho ayudaron para la promoción de su trabajo”.
Y allí queda su disco junto a Ramón Brito y tantos recuerdos…
Luego, a descender la pendiente, que tanta vida desbordada lo aceleró todo. Y cuando sobrevino la venta de la empresa discográfica con la que había grabado (Tico) a la Fania, La Lupe no pareció encajar.
Hay tantas cosas por preguntarte, ya imposibles…
Luego, la caída en la casa, el accidente que la llevó a una silla de ruedas, el incendio de su hogar.
Ay, Lupe.
Y su retiro a un modesto apartamento, la “cura milagrosa” en una iglesia evangelista y su decisión de elevar su canto solo a Dios, rechazando cualquier contrato… una historia cinematográfica, pero absolutamente real.
El 29 de febrero de 1992 sufrió un paro cardíaco fulminante mientras dormía en un pequeño apartamento que compartía con su hija Rainbow en el Bronx.
Entre sus numerosos admiradores se cuentan el fallecido escritor cubano Guillermo Cabrera Infante y el director de cine español Pedro Almodóvar, que incluyó en la banda sonora de sus películas algunas interpretaciones suyas ("Puro teatro", por ejemplo, suena en Mujeres al borde de un ataque de nervios). De hecho, en España La Lupe es comúnmente asociada con el director manchego. Laberinto de pasiones (probablemente la opción ideal para los que quieran conocer someramente el trabajo de la cantante cubana), Al borde de un ataque de nervios y La ley del deseo (todos ellos, títulos de películas de Almodóvar). El tema Qué te pedí aparece también al inicio de la película Nada (2001) del director cubano Juan Carlos Cremata.
Hoy una calle de Nueva York lleva su nombre: La Lupe Way.   

 

 

1 comentario:

  1. Una biografía muy interesante la de esta mujer.

    "Puro Teatro", todo un clásico: ¡con esa voz y esa entonación!...

    Saludos Ana B.

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